Reseña: Una historia Divertida, Emily Henry

Título: Una historia divertida
Libro único
Autor: Emily Henry
Editorial: Titania, Urano
Género: Romance contemporáneo
Formato: Papel
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Sinopsis:

PRIMERO FUERON DESCONOCIDOS. DESPUÉS, COMPAÑEROS DE PISO. Y LUEGO. EN FIN, ES UNA HISTORIA DIVERTIDA.

A Daphne siempre le había encantado la forma en que Peter, su prometido, contaba su historia. Cómo se conocieron, se enamoraron y regresaron a la ciudad natal de él, a orillas de un lago, para empezar una vida en común. Se le daba realmente bien explicarlo. hasta que se dio cuenta de que, en realidad, estaba enamorado de Petra, su mejor amiga de la infancia.

Y así es como Daphne empieza su nueva vida: en la hermosa Bahía de Waning, Michigan, lejos de su familia y amigos, pero con un trabajo idílico de bibliotecaria infantil (con el que a duras penas llega a fin de mes). Por eso, se plantea compartir piso con la única persona que podría entender cómo se siente: Miles Nowak, el exnovio de Petra.

Desaliñado, caótico y con tendencia a escuchar baladas tristes para consolarse, Miles es completamente opuesto a la práctica y discreta Daphne, tan reservada con su vida personal que sus compañeros de trabajo bromean sobre si pertenece al FBI o es una testigo protegida. En general, los dos nuevos compañeros de piso se evitan el uno al otro, hasta que un día, mientras ahogan sus penas, entablan una frágil amistad y trazan un plan. Y si, para seguir ese plan, tienen que compartir fotografías de sus aventuras veraniegas juntos, fotografías que den pie a sacar conclusiones equivocadas, ¿quién podría culparlos?

Pero Daphne solo lo hace para dejarse ver, por supuesto, porque nunca empezaría un nuevo capítulo de su vida enamorándose del exnovio de la nueva novia de su exnovio. ¿verdad?

Una historia divertida…. No tiene nada de divertida. Es una historia de crecimiento personal, salud mental, personajes profundos, amor sano y drama. Claro que tiene un toque de humor, pero eso tiene que ver más con la personalidad despreocupada de Miles, que de la historia.

Hermanas, yo estaba es una montaña rusa de emociones. Pasaba de reírme a enojarme y para luego llorar a moco tendido.

Este es el segundo libro que leo de esta autora y francamente me está gustando mucho su escritura. No encontrarás una trama fácil, romance empalagoso y escenas subidas de tono porque es lo que les gusta a la gente. No, ella es la clase de autora que te dará una historia sencilla con un trasfondo profundo. Desnudara a sus personajes, los hará enfrentarse con su lado más oscuro, revivirá sus traumas… todo ello para hacerlos sanar, encontrar la luz al final de camino y vivir feliz.

Y a mí me encanta. Porque me hace pensar que la felicidad no sólo está enfrascada en los libros, sino, que es posible encontrarla en la vida real.

Miles y Daphne, son personajes que se sienten reales, tienen defectos, virtudes, miedos y sueños. Tienen pasados que los han marcado y dificultades que encuentran en el camino. La pasan mal, no son perfectos. Y eso es lo mejor de ellos.

Seguir adelante

Nuestros protas tienen algo en común. Ambos han sido dejados por sus parejas, y a su vez, los han dejado por la pareja del otro.

Un enredado total, si me lo preguntan. Este problema dejó a Daphne en un lugar desconocido, sin casa, sin amigos y una familia. Ella lo dejó todo por su prometido y ahora no tiene donde dormir. Afortunadamente Miles tiene un lugar disponible en su casa (pues su novia se fue). Ambos no solo son compañeros de casa, también del dolor, la traición, de duelo y depresión. Vemos como son el apoyo involuntario del otro, como uno se hace el fuerte mientras el otro se hunde. Como a pesar de todo ello, siguen adelante. Se cuidan, se vuelven cómplices. Pero no se dejan caer.

Siguiendo adelante con sus vidas.

Las cosas que merecen la pena conllevan un riesgo.

Ser uno mismo.

Todo el libro está escrito desde el POV de Daphne, eso nos permite ver la evolución de su personaje. Al principio está devastada por la traición de su prometido Peter, pero no sólo eso, sino por la pérdida de un futuro que creyó certero. Se enredó tanto en Peter que se perdió ella. Estar con Miles fue una especie de liberación, pues con él no había expectativas que llenar, no era una audición para encajar en un lugar. Solo era ella, triste, rota… pero ella. Y eso la llevó a reencontrarse.

Encontrar tu lugar en el mundo.

Al estar en un pueblo que ella conocía había dos posibilidades.

Una, que huyera a otro lugar que no le recordará a su ex.

Dos, conocer el lugar, crear nuevos recuerdos y no dejar que su ex la defina.

Así que eso hizo. Se permitió abrirse un poco a la gente, sus compañeros de trabajo. Se permitió tener amigos. A caminar por las calles, a ser turista. Y a encontrar una familiar no sanguínea que la acepte por cómo es.

Una historia divertida, es una historia hermosa de crecimiento, de personajes imperfectos y de no tener miedo al cambio.

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