Título: La gestante.
Autor: Mayra Potenza (Gracias por el libro)
Libro único.
Editorial: Autores de
Argentina.
Género: ficción realista.
Sinopsis:
La vida de
Lara se halla destrozada a causa de los múltiples tratamientos fértiles
fallidos.
Cuando
conoce a David, comienza a vivir un amor inesperado. Hasta que un novedoso
tratamiento de fertilidad hecho mediante óvulos donados, amenaza con romper su
vida nuevamente.
Lara se
enfrentará a sus propios fantasmas para poder realizar el tratamiento sin
perderse a sí misma ni perder a David.
La novela se
adentra en el universo de la infertilidad y lo hace con intensidad, pero
también con mucha dulzura.
Una historia
luminosa acerca de la búsqueda de la felicidad.
Los libros tienen
historias, algunas pasan desapercibidas, otras son épicas, divertidas,
románticas, dulces…pueden causar terror, suspenso e incluso incomodidad…puede reflejar
una parte del alma humana.
La gestante,
refleja el dolor en el estado más crudo, difícil y egoísta. Por qué el dolor es
así, nadie más lo puede comprender más que tú, nadie puede entender la magnitud
de la herida y cuánto te está costando sobrevivir.
Y esto se puede
respirar en cada página de la historia.
Lara nos cuenta cómo ve sus días grises, en un país que no es el suyo, con sueños rotos, un matrimonio fallido y sobre todo la herida emocional de su infertilidad. El cómo “esto” ha afectado su vida y su existencia. Lara en los primeros capítulos es una laceración abierta, sangrante e infectada con pus, que intenta juntar sus pedazos y coserlos ella misma.
Cuando conoce a David,
un arquitecto buen mozo y de tierno corazón, ella ve un poco más de luz en su
vida. Comienza a creer que puede salir del hoyo en el que está. David al amarla
con sus lesiones y demonios internos, la ayuda a amarse a sí misma y aceptarse.
Sin embargo, cuando David le habla de un nuevo método para concebir un bebé, Lara
enloquece (por decirlo de alguna manera), es donde el libro trasciende del
dolor, a la confusión, incomodidad, ira…esperanza, una que ella estaba
intentando extinguir, pero el deseo de ser madre es más fuerte y no le importa
someterse a mil tratamientos más, a vender su casa, su ropa y su mascota con
tal de quedar embarazada.
La infertilidad, es
un monstruo en la cabeza, bastante feo. Uno que es alimentado por la sociedad.
Por mentalidades insensibles.
Actualmente hay mujeres, que no les interesa tener hijos…y está bien. Hay mujeres que quieren tener un hijo y jamás podrán…otras que necesitan invertir capital que no tienen para lograrlo…. Pero la sociedad esta tan acostumbrada a la familia tradicional, que el que una mujer a cierta edad no tenga un marido o hijos es considerada una paria social, ¿y lo peor? Es que te lo recuerda con preguntas incomodas: ¿para cuándo el novio?, ¿cuándo vas a tener un bebé? Se te está pasando el tren, tu reloj biológico no espera. Cuántas veces no se han escuchado este tipo de frases, ¿cuántas veces más se tiene que decir? Ya sea por decisión propia o por un factor biológico …esto tiene que parar…se tiene que ser más empático, y dejar de anular el sentir del prójimo, no hacer menos el dolor/decisión de la otra persona, ser un poco más sensibles.
Como sociedad, hay
que dejar de ser hipócritas. Dejar de juzgar, etiquetar…hacer de menos el
sufrimiento de otras personas. Dejar de lado los prejuicios.
"Sexo debil...,tremendamente poderoso, capaz de llenarse cuanto mas da de si, de entregarse, derramarse al completo sobre otro sin vaciarse."
Lara, sufre todos
estos estigmas mentales, el qué dirán (su familia, sus amigos, la gente con la
que se cruza). Se pone en un dilema mental de si seguir alimentando la llama de
la esperanza o extinguirla. Porque ella sabe a lo que se somete (ya lo ha hecho
anteriormente) debe desnudarse, no solo en cuerpo, sino en alma, sabe que la
van diseccionar (o por lo menos ella así lo siente) que hay que maltratar su
cuerpo con medicamentos, hormonas e inyecciones. Que va a torturar su mente con
el posible fracaso del nuevo tratamiento ...y sabe que su estabilidad emocional
penderá de un hilo, no solo por ella, sino por David, el hombre que ama, pero
que siente que no la comprende, que lo siente ajeno a su dolor y deseo.
Aun así, el deseo
es más fuerte que otra cosa. Porque los humanos somos rebeldes, y cuando te
prohíben una cosa…la deseas con más fuerza. La infertilidad tiende a ser así,
desear ser madre con desesperación. Así que Lara acepta este nuevo tratamiento,
uno que pone en duda su educación, la religión y la bioética: la ovodonación.
La ovodonación a
grandes rasgos, es una fecundación in vitro, pero con los óvulos de alguien
más…de una mujer donante. Estos óvulos, son fecundados con el esperma de tu
pareja (o donados también) y donde la paciente sólo sería la gestante.
Exponiendo otros temas… no solo el dolor de Lara por la infertilidad ... .si no ahora poniendo en duda todo lo que ella cree que es correcto. ¿hasta dónde es capaz de llegar solo por ser madre? Si dios, no quiso hacerla fértil ¿no es eso jugar contra su voluntad?, ¿hasta dónde la ciencia y el hombre pueden manipular células, modificar genes, generar vida donde no debe de existir? ¿cómo algo tan éticamente dudoso ... Puede generar un rayo de esperanza? ¿tiene que sacrificar su felicidad por su moral? ¿es acaso la ovodonación mala? Le generan tantas dudas y no existen las respuestas correctas.
La gestante, no es
un libro para todo el mundo. Es una historia de ficción realista, con un tema
súper difícil y sensible. No encontrarás dragones, ni magia, no encontrarás una
épica historia romántica ... Pero si hallaras la historia de una mujer o, mejor
dicho, las piezas rotas de una mujer, su proceso de sanación interna, de amor
propio, de dejar a lado todos sus prejuicios mentales y encontrar su felicidad.
Verás una historia
que te dolerá, que te hará reflexionar…una historia cruda y optimista al mismo
tiempo.
¿El final?
Bueno es hermoso…yo
quería ese final. Quería leer las últimas páginas… auto-spoilearme solo para
saber en que terminaba, saber si se lograra el objetivo o no.
Y, sin embargo, ahora que estoy escribiendo esta reseña, lo siento agridulce. Porque a pesar de ser el final que yo ansiaba ... .me supo amarga. Pero eso tiende a ser la felicidad, algo egoísta, algo tuyo…tanto como el dolor.
¡Hola!
ResponderBorrarQue bonita reseña :)
La verdad es que la trama me parece muy interesante y siento que podría empatizar mucho con la protagonista, y no porque tenga esta condición, si no por la manera en que me imagino que está narrada.
¡Un beso!